El envejecimiento normal implica cambios físicos y psicológicos que pueden causar una disminución de las actividades funcionales, pero esto es inevitable.
Siguiendo el desarrollo del ciclo vital de forma normal al llegar a la vejez no necesariamente tenemos que hablar de discapacidad y enfermedad o deterioro de forma general esto sería tener una visión reduccionista.
Actualmente y cada vez más, gracias al desarrollo de la medicina y la promoción de estilos de vida saludables nuestros mayores gozan de una mayor salud tanto física como psicológica.
Cuando se envejece de la mano de la enfermedad surgiendo cambios drásticos en la vida se puede hablar de envejecimiento patológico.
Desde la geropsicología clínica se pretende realizar intervenciones psicológicas en personas mayores con el objetivo de conseguir un envejecimiento saludable y positivo, ya que, si que es posible efectuar ese cambio psicológico y conductual mediante el análisis de las fortalezas, recursos y competencias de cara a mejorar la adaptación, salud y sobre todo la calidad de vida.