Introducción
La asertividad es una herramienta de comunicación crucial para enfrentarte a diversas situaciones. Sin embargo, es importante saber utilizarla correctamente para obtener el resultado deseado. Aquí te presento algunas técnicas para una comunicación asertiva:
1. Elige el Momento y el Lugar
A veces, la asertividad puede ser percibida como un acto de agresión. Es fundamental elegir el momento y el lugar adecuados para expresar tus sentimientos y opiniones.
2. Habla con Calma
Mantén la calma al comunicarte. Un tono sereno puede hacer que tu mensaje sea recibido de manera más positiva. Para saber cómo gestionar tus enfados en caso de que te cueste hablar con calma, siempre puedes mirar mi artículo acerca del manejo de la ira.
3. Repite hasta que te Escuchen
Si sientes que no te están escuchando, repite tu mensaje de manera clara y tranquila hasta que lo hagan.
4. Explica Cómo te Sientes
Expresa tus sentimientos de manera clara: «Me siento incómodo/a con esto». Esto ayuda a la otra persona a entender tu perspectiva.
5. Rechaza la Opción de Discutir Más a Fondo o Cambia de Tema
Si sientes que la conversación no está progresando, rechaza discutir el tema más a fondo o cambia de tema de manera educada.
6. Retírate si es Necesario
Si ninguna de estas técnicas es eficaz, puedes optar por marcharte. A veces, una retirada a tiempo es una victoria.
Ejemplos de Comunicación Asertiva
Aquí tienes algunos ejemplos prácticos de cómo puedes aplicar la comunicación asertiva en diferentes situaciones:
- «Gracias por tu sugerencia. Lo tendré en cuenta.»
- «No, no estoy ocupado el martes, pero me gustaría hacer otras cosas por mi cuenta.»
- «¿Podrías explicarte mejor? No entiendo lo que me quieres decir.»
- «Entiendo lo que me estás diciendo, pero no estoy de acuerdo.»
- «Esta situación me ha molestado, ¿podemos hablar de ello?»
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